Actividades de Estimulación Temprana de 12 a 18 meses | PARTE 2

Ésta es la continuación de artículo Actividades de Estimulación Temprana de 12 a 18 meses | PARTE 1

Para realizar las actividades de Estimulación Temprana de 12 a 18 meses es importante tomar en cuenta que de todas las áreas del desarrollo el lenguaje es una de las más difíciles de desarrollar porque depende básicamente de cuánta conversación se tiene con el bebé. Un televisor prendido con un programa infantil no estimula el desarrollo del lenguaje del bebé. Lo que alienta su capacidad de comunicarse verbalmente son las conversaciones y las canciones. Por lo tanto, el lenguaje se aprende al escuchar hablar a otras personas: mamá, papá, abuelitos, cuidadores, tía, primos.

Las actividades de Estimulación Temprana de 12 a 18 meses en el área personal social se caracteriza porque el niño comienza a hacerse independiente poco a poco. Para ello necesitará que el adulto que está a su lado lo observe para ir dándose cuenta de qué actividades puede realizar ya solo y le pida hacerlo. Por ejemplo, si usted observa que él/ella ya se puede sacar solo las medias y los zapatos, pídale que lo haga cada vez que llegue el momento de cambiarse las medias y/o los zapatos.

Área del Lenguaje

• Imitación Gestual

Cante al niño alguna canción que le permita realizar actividades simples que él pueda imitar: por ejemplo, “así comía, así, así; así lavaba, así, así; así cosía, así, así, etc.”

Trabaje con las manos y los dedos: “Este dedo es el papá, este otro es la mamá, …”

Ante un espejo grande, jueguen a hacer algunos gestos como tocar su cabeza, abrir su boca, sacar la lengua, inflar las mejillas.

• Comunicación

En esta etapa será frecuente que el niño pida cosas señalándolas con su mano o su dedo índice. Antes de darle cualquier cosa que él quiera, póngala a su vista y anímele a nombrarla. Felicite los intentos del niño aunque sólo llegue a pronunciar la última vocal de la palabra que usted le dijo. Lo importante es que el niño tenga la intención de iniciar la “jerga infantil”.

Es importante hablar despacio articulando las sílabas de las palabras de manera clara de forma que el niño puede ver con claridad cómo se mueve la boca para decir, por ejemplo, “sopa” o “zapato”, “teta”, “calle”, “manzana”, “plátano”, “luz”, “uva”.

• Imitación vocal

Juegue con el niño a escuchar ruidos ambientales familiares y anímele a que trate de repetirlos, aunque sea de forma aproximada. También puede usar para el juego, vídeos de sonidos, animales de peluche, libros de figuras, tarjetas.

Cuando el niño emita alguna sílaba que se refiera a una palabra familiar como “ta-ta”, “pa-pa” repítala para que él vuelva a emitir tratando de que la asocie con la persona o el objeto en cuestión.

Entone al niño canciones familiares, insistiendo en alguna sílaba o palabra familiar para él. Cuando el niño esté atento en este juego haga un poco de hincapié en esa sílaba o palabra para que él la repita.

Juegue con el niño utilizando objetos atractivos para él: un carro, una pelota. Emita usted algún patrón vocal propio de ese objeto, por ejemplo, haga algo así como “brrr” para el carro; “pum” para la pelota que cae; “tas” para la puerta que se cerró.

• Comprensión verbal

Cada vez que movilice al niño para realizar algo, por ejemplo para comer, explíquele con claridad lo que van a hacer.

                                       “Siéntate, vamos a comer la papa”                                                                                              “Abre la boca”.                                                                                                            “Recoge la muñeca”.                                                                                       «Levanta los brazos para ponerte la camiseta»

Cuando dé al niño una instrucción, procure mirarle a la cara. No le dé dos o tres ordenes al mismo tiempo: dele una y si necesita ayuda para llevarla a cabo dele su ayuda física.

En este tiempo el niño puede empezar a contestar SI y NO simplemente moviendo la cabeza en un sentido u otro ante cuestiones que se le plantean. Haga al niño preguntas simples dentro del contexto y ayúdele a emitir una respuesta. Por ejemplo, si nota que el niño quiere comer, pregúnteselo y espere su respuesta.

Cuando haya en la habitación alguna persona familiar, pregúntele al niño “¿dónde está el tío Alberto?, por ejemplo, felicite al niño si señala el lugar correcto y diga usted “ahí” en tono festivo, animando al niño a repetir. Haga lo mismo con los abuelitos, los tíos.

• Expresión verbal

Las canciones son una buena vía de motivar la producción de silabas. Por ejemplo, “Bajo de un botón”

                                             Bajo de un botón, ton, ton                                                                                               Que encontró Martin, tin, tin                                                                                           Había un raton, ton, ton                                                                                                 Hay que chiquitin, tin, tin.

Anime al niño a que las vaya repitiendo las silabas “ton, ton” y “tin tin” con usted. Omita intencionadamente algunas palabras y anime al niño a decir las palabras omitidas. Felicite al niño por participar en la actividad.

En este período, es normal que el niño emita expresiones ininteligibles (jerga) en sus juegos o con otras personas; aproveche estas ocasiones para “mantener conversaciones” con él, ya que esta jerga tiene un gran valor comunicativo.

En esta época es importante que el niño empiece a indicar sus deseos señalando y/o vocalizando.

Cuando el niño indique sus deseos señalando o vocalizando, respóndale describiendo lo que usted ha entendido que él quiere. Por ejemplo:

“¿quieres que te baje la silla?, de acuerdo, te ayudaré a bajarla”.

Su respuesta ayuda al niño a resolver su problema y le expone el vocabulario que él necesitará para manejar su ambiente por medio de palabras. Anímele a hacer cosas por sí mismo diciéndole las palabras adecuadas cuando él no lo haga, animándole a imitarlas. Felicite cualquier respuesta del niño.

Área Personal Social

El área personal social se refiere a las actividades de valerse por sí mismo que el niño puede empezar a realizar dependiendo de su edad poco a poco con más complejidad. Lo que se busca es que al niño se le dé la oportunidad de empezar a atenderse él mismo. Esta área esta muy relacionada con la autoestima y la frase «yo puedo».

• Alimentación

Es importante que el niño tenga su silla especial para comer. También es bueno, que siempre que sea posible, el niño coma con el resto de la familia o, al menos, que esté presente en la mesa mientras los demás comen.

Ofrezca al niño cada vez alimentos menos triturados y sólidos semi duros para que estimule su masticación. Dele también trocitos de fruta: plátano, pera, manzana.

Mientras usted le da de comer con la cuchara, dele otra cuchara también a él para que coma paralelamente.

Es importante que todos los días coma algún alimento con la mano: una galleta, un pedazo de pan, una pierna de pollo, papas fritas, fruta.

Use con frecuencia el vaso o la taza. Puede que mantenga el uso del biberón, pero es recomendable que sólo sea para la leche. Los demás líquidos como agua, jugos es mejor que sean en vaso.

• Vestido

Como jugando ponga en el brazo y pierna del niño un aro o pulsera para que se la quite tirando de él o de ella.

Motive al niño a que siempre se quite: los zapatos, las medias, el gorro, el babero.

Deje una manga de la camiseta a medio sacar (a la altura del antebrazo) y anime al niño a que termine de quitársela tirando de ella. Haga lo mismo con los shorts, déjelos a la altura de la rodilla.

Ponga un aro grande en su cuello y anime al niño a que se lo saque. Haga los mismo con los polos cuando están a la altura del cuello y son de cuello ancho.

Anime al niño a que termine de ponerse alguna ropa como chompa (chamarra), polo (camiseta).

•  Aseo

Enseñe al niño a sonar la nariz mientras usted le ayuda con el papel higiénico.

Anime al niño a manipular el agua y luego a tomar conciencia de la suciedad de sus manos y cómo las puede dejar limpia con el jabón. Enséñele a abrir y cerrar el caño, luego a secarse las manos con una toalla pequeña. Haga lo mismo con el lavado de cara.

Mientras peina al niño ofrézcale un peine para que lo lleva al pelo intentando peinarse él también.

Deje al niño jugar en la bañera con juguetes, con la espuma, con las esponjas, para hacer más agradable esta experiencia.

Lavarse los dientes

Lavarle la boquita y/o los dientes al niño es un hábito importante a empezar en el primer año de vida. A los 12 meses de edad el niño puede empezar a limpiarse los dientes por sí mismo. Usted completará la actividad pero él ya va a ir aprendiendo hábitos dentales.

En el siguiente artículo Estimulación Temprana Actividades para bebés de 18 a 24 meses | PARTE 1 encontrará ideas para trabajar las áreas motora gruesa, motora fina e intelectual del niño cuando ya cumplió el año y medio de edad.

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Fuente:

1. Little Texans, Big Futures. Su guía de aprendizaje temprano para bebes, niños pequeños y niños de tres anos de edad. Texas Early Learning Council. Houston, Texas. Página web: www.littletexans.org
2. Programa de Atención Temprana. Isidoro Candel Gil y otros, Editorial CEPE, 1999.